Es muy importante llevar a nuestro organismo a la calma de nuevo cuando terminemos nuestra jornada deportiva: eliminamos tensiones, mejoramos la circulación, reducimos los dolores posteriores (agujetas)…
Cada estiramiento final debe estar adaptado a la actividad que hemos realizado. Os dejamos el nuestro para finalizar de forma adecuada nuestro entrenamiento.
- CUADRICEPS: agarrados a algo, nos agarramos el pie por detrás y estiramos hacia arriba.
- ISQUIOS Y GEMELOS: subimos la pierna a algo y nos inclinamos a tocar la punta del pie que debe mirar hacia arriba.
- PSOAS: tenemos una pierna doblada y la de atrás estirada.
- ABDUCTORES: sentados en el cuelo con las piernas abiertas, nos inclinamos hacia delante.
- ESPALDA: de rodillas nos inclinamos hacia delante y llevamos los brazos todo lo lejos que podamos.
- GLÚTEOS: tumbados con las piernas estiradas, doblamos una pierna y nos la acerca.